Reseña Literaria "Ben Hur" Lewis Wallace
Título Original:
Ben Hur
Autor: Lewis Wallace
Traductor: E.F Lara
Publicación: 12 de noviembre de 1880
Edición: 1976
Páginas: 235
Editorial: Difusión
Tópicos nucleares: La venganza. La enemistad y el amor hacia la familia.
Reseña.
Esta
novela comienza con el pintoresco hecho de tres reyes que vienen de extremos
diferentes del mundo. Uno indio, el otro griego y un egipcio. A medida que
lees, sin ninguna referencia directa te das cuenta que se trata de los “Reyes
Magos”, que siguiendo la revelación de un ángel en su sueño deben seguir la
estrella que anuncia la llegada del mesías. Si bien, aquí se narra con mucha
cadencia, buen ritmo y descripciones precisas el recorrido de José y María al
establo donde dará a luz a Jesús, no es más que el principio con el que el
habilidoso escritor nos retrata la escenografía de los hechos posteriores y de
las cualidades de la época.
Después
de cinco años de haberse distanciado de su mejor amigo de la infancia, Judas
Ben Hur, un descendiente de una estirpe noble judía, se encuentra frente a una fuente, con su amigo
romano, que regresaba de su formación militar de la casa
de éste. Su nombre es Messala. Allí, el
reencuentro pasa de afectuosos a desafiante cuando se tocan temas religiosos y
Messala se refiere al judaísmo como una tradición sin sentido práctico y
eficiente, reclamándole a Juda Ben Hur, que el camino de la guerra es el más
propicio en los tiempos que corren. Usa una frase que se contrapone a la de su
amigo judío, cuando este le dice “la paz sea contigo”, Mesala le contesta,
“Abajo Eros y viva Martes”. Judas recuerda que cuando eran niños, su amigo ya
solía burlarse de los judíos. Tiene un entredicho en ese encuentro, Ben Hur,
decide retirarse de la conversación muy ofendido.
Una
tarde, después de confesarle a su madre y su hermana que quería ser soldado
romano, escucharon desde el balcón de los Hur, el bullicio de la gente que
insultaba, gritaba y vociferaba de lo más hostil al nuevo procurador de Judea,
Valerio Graco, quien con una comitiva de soldados marchaba por las calles.
Juda
Ben Hur, quiere ver mejor lo que pasa desde su balcón y apoya su mano en el
parapeto que tiene una loseta suelta. Ésta cae y golpea en la cabeza del
procurador. Es así que irrumpen en su casa y a las órdenes de su amigo romano,
Messala, es acusado sin juicio como asesino del procurador. Lo toman cautivo,
lo encierran a él y a su madre y hermana, a pesar que suplicó a Messala que las
salvara a ellas por su vieja amistad. Cosa que no sucedió. Juda Ben Hur es
condenado a las goletas. Es decir, pasa a ser un esclavo de los romanos y vive
como remero durante años. Allí se convierte en alguien fuerte, ágil y alimenta
día a día su deseo de venganza contra Messala, su amigo de la infancia.
En
una batalla contra piratas, un general romano Arrius, se compadece de él.
Admira sus destrezas como remero y sus cualidades nobles. En ocasión tienen una
conversación y Juda, le cuenta que él está esclavizado injustamente sin juicio
y que fue acusado de asesino. Arrius, le cree, aunque no está muy convencido,
sin embargo da la orden de que le suelten las cadenas que se amarran a los pies
de los esclavos remeros.
En
una de esas batallas contra los piratas, sufren una embestida y la goleta
naufraga. Ben Hur, logra salvar a Arrius, quien termina de creerle y cuando
regresan a Roma, lo adopta como su hijo a quien hereda toda su fortuna.
Ahora
con una fortuna, se entera que en Antioquia un amigo de su padre guarda la
fortuna de los Hur. Acude a verlo y le reclama, pero Simónides el anciano le
pide pruebas más contundentes. Pregunta de su madre y su hermana, al no tener
respuestas se retira angustiado.
Judas
se encuentra más cerca de su venganza al enterarse que Messala participa de las
carreras de cuadrigas y junto a Malluch, planifican la venganza, que consistían
en humillarlo públicamente y dejarlo en la pobreza a través de esa competencia.
Lo
dejarían en la pobreza por medio del sistema de apuestas que daban como fácil
ganador a Messala.
La
contienda inicia en el circo donde Ben Hur mientras corrían padece la
alteración del humor de sus caballos por los azotes que Messala hace sobre
ellos sorpresivamente, aun así controla el carro y al final de la carrera, con
una de sus ruedas logra embestir el carro del romano quien cae debajo de los
caballos y queda inválido para siempre.
En
medio de estos hechos, Ester enamorada de Judas, no es correspondida por que él
está comprometido con Iras, la egipcia hija de Baltasar quien al final será una
infiltrada de Messala.
Después
de esto Messala contrata a un hábido guerrero romano para que asesine a Ben Hur,
pero como estos se conocen hace un arreglo y negocia traicionar a Messala.
Para
estos tiempos asume Poncio Pilatos quien hace liberar a todos los presos del
procurador anterior. Ahí se encontraba la madre y la hermana de Judas.
Cuando
se acercan a ella, estas repiten las palabras con las que deben proteger a la
gente de los leprosos, “impuras, impuras…”, es así que desandan un tiempo hasta
terminar en el Valle de los Leprosos, luego de haber confirmado que Ben Hur
estaba vivo. La única que sabía de la condición de las mujeres era la criada,
Amrah, quien guarda el secreto por pedido de estas.
Durante
unos tres años Jesús que es un personaje de trasfondo histórico de los hechos
desanda Galilea predicando y Hur, sigue conmovido todos sus acontecimientos.
Cuando
la criada se entera de los milagros de Jesús, hace ir a la madre y la hermana al
encuentro de éste para ser curadas. Se encuentran en un camino con un
adelantado de la caravana que en multitud acompañaba a Jesús, quien les dice
que se pongan en lo alto de una roca, que, si tienen fe, él advertirá y les
cumplirá el milagro. Cuando ven pasar a Jesús, estas le gritan suplicando misericordia.
El Nazareno le interroga sobre su fe, a lo que ella le contesta que él es el
mesías, el hijo de Dios. Él le dice, “Mujer, grande es tu fe, sea como quieres”
y quedan sanadas. En la misma comitiva, se encuentra Judas Ben Hur. Es ahí que logra
reencontrarse con su madre y descubrir que no estaban muertas.
Lo
que resta de la historia son los últimos días de Jesús previo a la crucifixión,
donde Ben Hur vive sin comprender cómo el que reinaría termina traicionado y en
la miseria sin reinar. Aunque logra entender que la forma de reinado de éste,
no es el de los hombres sino en los cielos.
Judas
se casa con Esther luego de descubrir que su prometida Iras, era enviada de
Messala y aunque ruega por el perdón de Ben Hur, no lo logra y lo maldice.
En
el epilogo, se relata la vida en familia de Esther y Hur con sus hijos después
de cinco años. Lo más trascendente es el regreso de Iras, ya anciana y sin los encantos
que la caracterizaban para decir que ella había asesinado a Messala por todo lo
que la hizo sufrir. Desaparece antes de recibir alguna respuesta por parte de
Ben Hur.
Valoración de la obra:
El
equilibrio entre contenido y forma es discreto. La historia está lograda con
importantes tintes conflictivos basados en la consumación de la venganza y el
anhelo de reencuentro con la familia. La extensión es la necesaria y su ritmo
es acelerado, tal vez demasiado, de modo que no llega a retratar con precisión las
riquezas escenográficas y culturales de la época romana. Hay una ausencia
significativa de imágenes que hacen a los aromas, el clima, los colores, los
gestos o los rasgos físicos de los personajes.
Las
sentencias del escritor son muy alegóricas y trilladas. Es decir, trilladas
para la época que se publicó que es en el año 1880. Se debe a que toma
expresiones bíblicas de uso popular no dejando ver una reflexión profunda en el
relato puesto que carece de evaluaciones.
Puede
cumplir con facilidad su propósito de entretenimiento, puesto que el conflicto
mantiene la intriga, pero el desenlace no fue esculpido, pintado o retratado
por el escritor con una prosa excelsa, que la que suele distinguir a algunos
premios nobeles.
Es
interesante la contradicción entre un personaje principal que profesa la fe de
otro secundario que es el mismísimo Jesús pregonero del perdón y la
misericordia, virtudes de las que carece el héroe de la novela.
Es
exaltado por sus virtudes marciales, su amor honesto, fiel y voluntarioso a la
familia, y por el rencor acérrimo a su amigo de la infancia.
Un
odio fundado en una traición a su condición a pesar que los hechos que
desencadenan la enemistad no están claros para el antagónico Messala.
Es
una obra para que los amantes de la Literatura, se deleiten con la narrativa
norteamericana de finales de siglo XIX, para analizar los hechos de la historia
sin los ojos de estos tiempos.
La
película de 1959 del director William Wiler, se comió al libro. Fue nominada a
11 premios Óscar, llevándose el de mejor película. Todo lo que se sabe del
libro hoy es en base de la película que no es, como es sabido, totalmente fiel
a la obra, si bien es de las que más se le acercan.
Recomiendo,
su lectura para aquellos lectores ansiosos, por su ritmo, para los que deseen
entender sobre la novela histórica, para los que quieren debatir sobre los antagónicos
religiosos de la época, para fundar críticas sobre el cine y la Literatura
norteamericana del momento.
Comentarios